Brioche integral al cardamomo

Por fin hago algo con cardamomo, que tenía muchas ganas de probar con este nuevo condimento para mí.

Como ya habéis visto otras veces, normalmente hago la masa madre (“polish”) con harina de fuerza, pero hoy no tenía nada más que harina integral y el resultado ha sido muy bueno.

Este puente lo he pasado en Francia, y siempre que voy de viaje me gusta llevarme algún recuerdo gastronómico. Esta vez ha sido azúcar perlado, que no hay manera que lo encuentre por Catalunya.

El aroma y el gusto de estos brioches es muy especial, me gusta porque des del primer bocado cierro los ojos y me transporto a lugares exóticos que es a lo que me recuerda el cardamomo.

Ingredientes:


Para polish:

- 50 gr. harina integral
- 50 gr. agua
- 2 gr. levadura panadería


Para la masa:

- 410 gr. harina integral
- 200 ml. leche
- 30 gr. mantequilla
- ½ cucharadita sal
2 gr. cardamomo
- lo que queda de levadura
- 1 cucharadita azúcar vainillada
- 1 cucharada y ½ de miel
- 35 gr. azúcar perlada
- 2 huevos

- Polish

Preparación:

Para la polish, normalmente utilizo harina de fuerza pero lo único que me quedaba en casa era integral, así que decidí probar a ver cómo quedaba. unimos todos los ingredientes indicados en un recipiente, los mezclamos bien, cubrimos con film transparente y tapamos con un trapo calentito. Dejamos fermentar durante 1 hora.

Cuando tengamos la polish, ya podemos hacer la masa del brioche.

Primero de todo pelamos el cardamomo, es decir extraemos las semillas y lo machacamos.

En la cubeta de la amasadora o en un bol si lo hacemos a mano, echamos la leche templada y los demás ingredientes que he indicado anteriormente (sólo 1 huevo ligeramente batido) incluido la masa polish y el cardamomo machacado y exceptuando el azúcar perlado.

Ponemos en el programa masa de la panificadora. Si lo hacemos a mano, empezamos a mezclar todos los ingredientes con la ayuda de una espátula y seguimos amasando a mano durante 15 minutos.

Dejamos reposar 1 hora tapada con film transparente y un trapo.

 

Una vez la masa ha doblado su volumen, dividimos la masa en porciones y hacemos los bollitos. Los colocamos en la bandeja del horno con un papel para hornear debajo y lo dejamos levar 30 min.

Pintamos con el huevo que nos queda, echamos el azúcar perlado por encima y calentamos el horno a 230 ºC. No olvidéis introducir en la parte de abajo un recipiente con agua para que genere vapor y salga más esponjoso.

Una vez caliente, introducimos los brioche en el horno unos 12-14 min.

Los retiramos y dejamos enfriar.